Multimasking

El cuidado del rostro es uno de los principales actos realizados en el cuerpo, una de las manaras más efectivas para poder tener resultados maravillosos en la piel de esta zona es la utilización de mascarillas.

Es por esto por lo que nace la tendencia del “Multimasking”,este tratamiento de belleza consiste en aplicarse, al mismo tiempo, una mascarilla diferente para cada zona del rostro; así se da un cuidado más focalizado, donde se ahorra tiempo y hasta dinero.

Esta técnica se origina debido a que el rostro no es uniforme, sino que cada parte tiene sus necesidades, especialmente  en las pieles mixtas, entonces  ¿por qué utilizar la misma mascarilla por todo el rostro?

De ahí sale la idea de combinar distintas mascarillas faciales, para darle a cada zona de la piel el cuidado que necesita, solo se debe de elegir mascarillas con distintas características y aplicarlas sólo en aquellas zonas donde se necesiten.

A la hora aplicar esta técnica, si se lleva mucho tiempo sin usar una mascarilla facial y toda la piel del rostro necesita de un tratamiento «multifuncional», lo más cómodo para empezar es dividir las zonas en tres partes:

Zona T: Esta zona abarca la frente, nariz y mentón, lo ideal es utilizar una mascarilla que regule el exceso de grasa; por ejemplo, las mascarillas a base de avena y limón son las más efectivas para esta zona.

Pómulos y mejillas: Estas zonas del rostro tienden a ser más seca, lo ideal es aplicar ingredientes nutritivos a base de aceites esenciales o mascarillas caseras con frutas ricas en agua y aceites.

Contorno de Ojos: Esta zona es de gran conflicto, ya que es una de las partes que va perdiendo su elasticidad con el paso del tiempo, así que las mascarillas recomendadas son las nutritivas, para evitar arrugas prematuras.

Hay diferentes mascarillas, cada tipo según su función, como por ejemplo purificantes o limpiadoras, iluminadoras o revitalizantes, hidratantes, nutritivas y reafirmantes.

En conclusión lo importante es analizar la piel, dividirla en grupos o zonas según sus condiciones, de manera que se pueda identificar zonas con exceso de sebo, otras zonas con deshidratación, quizá otras donde hasta se necesite reafirmar.