Durante la época de verano lo mejor es estar hidratado durante todo el día, y una de las mejores frutas para lograrlo es la sandía.
Este alimento tiene un sabor suave, dulce, agradable y lo más importante es que tiene un alto contenido de agua, por lo cual resulta muy refrescante e ideal para estas épocas de calor. Por otro lado posee muchas propiedades para la salud además de tener un color rojo bastante llamativo.
Al consumir sandía se promueve la salud cardiovascular, ya que proporciona al cuerpo arginina y citrulina, que son beneficiosas para el corazón y ayudan con los problemas de hipertensión; Entre otros de los nutrientes que se pueden obtener de la sandía sobresalen el licopeno, las vitaminas A-B6- C y los minerales como el magnesio y potasio.
Es idónea para aliviar la fatiga muscular, esto se debe a que entre sus componentes la sandía contiene citrulina, adecuada para que los músculos del cuerpo se relajen y obtengan energía de nuevo, por lo cual se puede consumir luego de practicar algún deporte o hacer ejercicio.
Se debe recordar que también contiene potasio, el mismo refuerza el sistema muscular y el sistema nervioso, por lo cual luego de una jornada larga de trabajo no está nada mal consumir un jugo de sandía.
Otro de los beneficios de esta fruta es su bajo aporte calórico y el no contener grasa, a su vez como tiene licopeno produce un efecto antioxidante en el organismo. De esta manera la sandía es una excelente fruta para mantener en estado óptimo el cuerpo.
El contenido de fibra que puede aportar esta fruta al consumirla ayudará a regular el aparato digestivo, previniendo padecimientos como el estreñimiento, lo que la convierte en una fruta muy buena y saludable.
Y se debe destacar la versatilidad que posee para ser consumida, tanto en jugos, brochetas de frutas, ponches, gelatinas o bien simplemente en una ensalada de frutas.
Esta fruta es beneficiosa para la salud, no obstante significa que es un superalimento o que se deba basar la dieta en torno a solo este alimento. Tampoco se debe consumir como sustituto de comidas principales o algún medicamento indicado por el médico.